* SYMFONIA: TIMO TOLKKI VUELVE A LA CARGA

“CUANDO ESTABA EN STRATOVARIUS, ERA UN HITLER BUENO”
Virtuoso guitarrista y prolífico compositor durante décadas de brillante trayectoria, el que fuera buque insignia de Stratovarius y Revolution Renaissance, TIMO TOLKKI, se embarca ahora en una nueva aventura de power metal melódico a bordo de Symfonia, un supergrupo que tiene entre sus filas a músicos de la talla de André Matos (ex Angra), Uli Kusch (Ex Helloween, GammaRay y Masterplan) o Jari Kainulainen (otro ex de Stratovarius) y que ha engendrado ya su primera creación, ‘In Paradisum’.

¿Symfonia surgió con la idea deliberada de crear un súper grupo de power metal o su formación fue algo más natural?
“Ambas. Básicamente partió de André Matos, que se mudó a Suecia. Todos estamos en Escandinavia, Uli Kusch y Jari están en Noruega y yo en Helsinki. Llamé a André Matos cuando oí que se trasladó a Suecia, conozco a Angra desde hace once años, vino a mi casa a Helsinki y empezamos a escribir canciones. Es un hombre de mundo, habla siete lenguas y realmente es un buen tío. La química entre André y yo es la clave de esta banda. La banda surgió de una forma completamente natural”.
¿Cómo ha sido la experiencia de trabajar con músicos como André Matos o Uli Kusch?
“Siempre me ha alegrado trabajar con grandes músicos. Siempre, desde que empecé. Y llevo tocando la guitarra cuarenta años. Siempre que he comenzado a tocar con bandas, como cuando lo hice con Stratovarius, los chicos eran buenos. Todo el mundo que ha estado en Strato era magnífico, los que estuvieron en Revolution Renaissance eran magníficos y todos los que están en mi nueva banda son magníficos, así que, ¿qué puedo decir?”
¿Tiene este álbum un aroma a tu estilo en Stratovarius o buscas reinventarte?
“Tú me dirás. He escrito como doscientas canciones de Strato. No me preocupa en realidad. Si coges todo lo que he compuesto en mi carrera, que está cerca quizá de las trescientas cincuenta canciones, y te fijas en todos los temas como una totalidad, no puedes decir qué estilo musical es. Son canciones separadas que no pueden etiquetarse en un estilo, porque no considero que tenga un estilo. Simplemente hago canciones y música. Creo que es la gente quien pone etiquetas a las bandas y a la música. En el caso de Stratovarius, por ejemplo, realmente no quería un factor de división, sino de unión. Mi música en Stratovarius nunca fue para dividir, sino para unir”.
¿Symfonia se asentará a largo plazo o es más bien algo eventual?
“No te tiras trabajando seis meses en algo que no crees que vaya a durar”.
Un trabajo duro, pero el resultado ha sido…
(Interrumpe) “¡No, hombre! Trabajo duro es cuando vas a un restaurante y ves al camarero currando diez horas por cuarenta euros al día. ¡Eso es trabajo duro! Lo que yo hago no es duro”.
¿Después de dar carpetazo a Revolution Renaissance será esta la banda definitiva?
(Ríe) “¿Cómo podría saberlo? Siempre que estado en una banda, ha sido “la última banda”. No te casas pensando en que te vas a divorciar”.
¿Es Symfonia el principal proyecto de los músicos que lo integran?
“Es una prioridad para todos los que estamos en esta banda. Yo tengo mi carrera en solitario como siempre, André tiene también su banda en solitario, pero todo coexiste muy bien. No tenemos ningún problema con ello, los tiene la gente. Quiero decir, la gente tenía problemas suponiendo que había pelea entre Stratovarius y yo, pero no tenemos ningún conflicto”.
¿Qué nos puedes contar acerca de la próxima gira del grupo?
“Desafortunadamente el desastre en Japón cambió nuestros planes, porque teníamos reservado un tour que empezaba en Japón, China, Taiwán y Corea. Veremos dónde podemos tocar, en este momento el único show confirmado es el de Sonisphere de Francia”.
¿Y qué hay de girar por salas en Europa?
“He hecho cerca de trescientos shows en mi carrera y España, desde la primera vez que vine con Stratovarius, siempre fue increíble. Claro que lo tenemos en mente y hacemos todo lo que podemos para estar ahí, pero todo el mundo sabe que el negocio musical se está viniendo abajo, los discos no se venden. Todas las bandas quieren girar y en este momento Symfonia está en el punto en el que tiene que ver dónde puede estar. No depende de nosotros, si así fuera estaríamos ahí mañana mismo”.
¿Consideras que hay mucha innovación estilística en vuestras canciones o siguen unas pautas más o menos establecidas en el power metal?
“Realmente no lo sé. Mi música sale del corazón, es todo lo que puedo decir”.
¿Tienes en mente otros proyectos al margen de Symfonia? ¿Quizá llevar a cabo aquello de ‘Return To Dreamspace’?
“Siempre estoy componiendo. Estuve en París la semana pasada para hacer promoción -también hubo concierto de Slayer y Megadeth, me encanta Slayer- e hice dos canciones en el hotel, siempre compongo. Tengo muchos planes y veremos lo que podemos hacer. Por supuesto queremos hacer más álbumes con Symfonia. Hay muchas cosas que quiero hacer, mucha música en mí. Estoy en un buen momento”.
¿Conservas alguna relación con tus ex compañeros en Stratovarius?
“Sí, estoy en contacto con Jens, Jörg… Estuve con Matias en Helsinki, tomé café y él cerveza, que yo ya no bebo. Hablamos como una hora y es muy buen tío. Entiendo completamente que soporte mucha presión por estar en Stratovarius, porque no es una banda fácil, todos tienen mucho talento. Canalizar este talento de modo que sea satisfactorio para todos no es sencillo, es por eso que cuando yo estaba ahí, era Hitler. Un Hitler bueno” (risas).
¿Hablas habitualmente con Timo Kotipelto, estáis en contacto?
“He estado con él unas cuantas veces, en una ocasión me lo encontré en el aeropuerto. Amo a Timo, es un gran, gran, gran cantante. Venía escuchando ‘Episode’ en el avión y después de todos estos años estoy muy orgulloso de esa banda, me trae muchos recuerdos”.
Lauri Porra declaró a este medio recientemente que Timo Tolkki seguía siendo una gran influencia en Stratovarius, ¿crees que es así en sus nuevos trabajos?
“Bueno, quizá es por educación (risas). Creo que no, que ya no los influencio, porque ellos tienen que encontrar su propio camino. No he escuchado ‘Elysium’ pero sí he escuchado ‘Polaris’ y me resultó esperanzador. Me encanta el disco, creo que tiene grandes temas, pero pienso que han ido hacia un punto al que querían ir en lugar de preservar el pasado. Cuando ‘Polaris’ salió por supuesto nadie me lo mandó, así que me lo compré en iTunes, y me he comprado más discos de Stratovarius por ahí. Me he pagado a mí mismo (risas). Amo todos los discos de Stratovarius. La gente que está ahora en la banda es muy talentosa; Lauri, que viene de una gran familia de músicos, es talentoso, Matias es talentoso, Jens es talentoso… Lo que estos tipos pueden hacer no es ‘Polaris’. Quizá sea ‘Elysium’, tengo que escucharlo, lo mismo me lo compro por iTunes. O igual me lo envían. Si los ves diles si eso: “¿Se lo puedes enviar a Timo?” (risas).
Te queda mucho que mostrar aún en el panorama del metal europeo, ¿no es así? ¿Te sientes con inspiración para ello?
“No estoy pensando realmente en ninguna escena. La gente piensa que tengo la cabeza ocupada todo el tiempo, y no es así. Mi vida es muy simple, tengo mucho tiempo para todo lo que elijo hacer porque en cierto modo yo no participo de esta sociedad neurótica. Tengo libertad para crear lo que quiero y tengo también herramientas para ello. Estoy muy contento en este momento de mi vida y veo años muy fructíferos por venir en el plano musical. ¡No puedo esperar para embarcarme en una gira!”
¿Cómo te gustaría ser recordado por tus fans en la posteridad?
“Creo que ya lo saben (risas). Quizá como que había un tío loco que hacía canciones melódicas e intentaba decirle algo a la gente, pero que realmente no fue entendido”.

pero este tipo de grupos no dura , los egos siempre les gana